
Kipling, eso sí, escribió 'El hombre que quiso ser rey' (Ed. Austral, 2016), una novela que nada tiene de ajedrez, salvo el título, en la que criticó los excesos del colonialismo, la inmoralidad de los métodos empleados por los colonizadores en la creencia de que eran superiores al resto de los pueblos conquistados. La aventura de Sultan Khan es un ejemplo de ello.