¡Enrócate, hombre!

Castling to win
de FM Robert Timmer

El rey es la pieza más valiosa sobre el tablero pero aún así muchos jugadores piensan poco dónde debe residir Su Majestad. La investigación de Timmer explica los peligros de dejar al rey en el centro y los posibles inconvenientes de enrocarse demasiado temprano, demasiado tarde o en el ala equivocada. Pero también explica cuando debe enrocarse primero o más tarde o si debe hacerse en largo o en corto.Puede encargar este entretenido libro ($23.95. Precio especial para la semana del 6 al 12 de marzo: $13.95) aquí.

Probabilidad de las piezas

Quizás aún no lo sepa, pero nuestro programa ChessBase 8 ofrece excelentes funciones de investigación también sobre esta materia.Por ejemplo, con el comando "Probabilidad de piezas". Se ejecuta en el listado de partidas: sólo tiene que resaltar las partidas a considerar, hacer clic derecho y ejecutar la función en el menú contextual que aparecerá. Así lo hicimos con las 2.018.426 partidas que tiene nuestra base de datos Mega 2002. Los resultados se muestran en ilustrativos y vistosos gráficos 3D:

En la imagen anterior tenemos las estadísticas para el rey blanco. El programa ha calculado en qué casillas pasa más tiempo el rey. Se ha acotado que sólo analice entre la jugada 10 y la 80. Como puede ver la casilla g1 es la elegida con amplio margen. Ello indica que la mayor parte de los jugadores enrocan en corto.

Aquí tenemos la gráfica correspondiente al rey negro. No sorprende que las preferencias se sitúen en g8.

He aquí otra función interesante. Empleando la sección de Maniobras de la máscara de búsqueda pueden encontrar las partidas en las que uno o ambos bandos no hayan enrocado.

Traducido al crsitiano, en la imagen anterior estamos buscando partidas en las que el rey blanco con se haya movido de e1 a g1 o de e1 a c1 entre las primeras 80 jugadas. El resultado son 181.993 partidas de un total de 2.018.426 (= 9%) en las que las blancas no se enrocaron. En 63.463 partidas, ningún bando se enrocó.

Aquí tiene donde suele ir el rey blanco cuando no se enroca. Es interesante ver como la casilla g1 es su favorita de todas formas.

Tim Krabbé, el reconocido Guardián de los Records Ajedrecísticos, nos indica que el enroque más tardío se produjo en la partida Neshewat-Garrison, Detroit 1994, cuando las negras jugaron 48...0-0. El enroque largo más remolón (46...0-0-0) ocurrió en Mitenkov-Strukov, Memorial Geller, Rusia 1999. Tim también nos indica que el mayor número de enroques en una misma partida fueron tres. Aquí tiene la joya:

Heidenfeld - Kerins, Dublín 1973: 1.e4 e6 2.d4 d5 3.Ae3 Cf6 4.e5 Cfd7 5.f4 c5 6.c3 Cc6 7.Cf3 Db6 8.Dd2 c4 9.Ae2 Ca5 10.0-0 f5 11.Cg5 Ae7 12.g4 Axg5 13.fxg5 Cf8 14.gxf5 exf5 15.Af3 Ae6 16.Dg2 0-0-0 17.Ca3 Cg6 18.Dd2 f4 19.Af2 Ah3 20.Tfb1 Af5 21.Cc2 h6 22.gxh6 Txh6 23.Cb4 De6 24.De2 Ce7 25.b3 Dg6+ 26.Rf1 Axb1 27.bxc4 dxc4 28.Db2 Ad3+ 29.Re1 Ae4 30.De2 Axf3 31.Dxf3 Txh2 32.d5 Df5 33.0-0-0 Th3 34.De2 Txc3+ 35.Rb2 Th3 36.d6 Cec6 37.Cxc6 Cxc6 38.e6 De5+ 39.Dxe5 Cxe5 40.d7+ Cxd7 0-1.