II Festival Internacional de Ajedrez "Villa de Bilbao"
Reportaje de la ronda 4 por el árbitro David Levy
Resultó un día mejor de lo que esperaban para los grandes maestros.
Khalifman con blancas logró la más pequeña de las ventajas en la apertura y
parecía intentar lograr el control de la columna d, que si hubiera sido capaz de
hacerlo, le hubiera dado una ventaja definitiva. Pero no sólo le fue imposible a Khalifman
dominar la columna d, sino que terminó por cedérsela a Fritz, que a partir de
ese momento lo sometió a abyecta tortura. Se llegó a un final en el que Khalifman
fue obligado a sacrificar la última pieza que le quedaba y entabló la partida
por los pelos. Así es la vida en estos tiempos, incluso para quien fuera Campeón
del Mundo, cuando se juega contra uno de estos programas de primera fila
mundial.
Partida final: Alexander Khalifman vs Fritz 9
Kasimzhanov definitivamente estaba mejor contra Hydra, logrando una posición
del tipo de la formación Maroczy luego de trasponer en la apertura a una especie
de Siciliana. Pero
Hydra se defendió con extremada tenacidad y agrupó sus piezas para sobreproteger
la casilla d5. Como cualquier escolar ruso sabe, si las negras no pueden jugar
la ruptura liberadora …d5 en la Siciliana, entonces la posición es buena. Hydra
trabajó como es debido …d5 y aunque Kasimzhanov más tarde tuvo algunas
perspectivas de ataque en el flanco de rey, habría sido muy arriesgado intentar
el avance por dicho flanco y Kasim por lo tanto lo dejo en tablas por
repetición.
Lucha entre iguales: Kasimdzanov vs Hydra
Con mucho la partida más larga del día, y de toda la competición, fue el
ridículo intento de Junior de ganar a Ponomariov, desde una variante Winawer en
la que el centro (y gran parte del resto del tablero) estaba completamente
cerrado. En la jugada 18 el escenario ya estaba armado para un rápido apretón de
manos. Pero Amir Ban, manejando a Junior, vio que el programa valoraba la
posición como ligeramente favorable a las blancas y, por lo tanto, quiso más.
Durante casi 50 jugadas no se movió ningún peón ni se capturó ninguna pieza,
mientras que Ponomariov movía un par de sus piezas adelante y atrás hasta las
náuseas.
Mareando sus piezas en una posición cerrada: Ruslan Ponomariov
Para entonces, justo cuando casi todos los que estaban en la sala de juego
iban a quedarse dormidos de aburrimiento, Junior avanzó su peón f a f3 y luego a f4.
Esto pareció dar nueva vida a Ponomariov, o quizás sólo esaba indignado por el
hecho de que Amir
no le hubiese ofrecido tablas. Sea cual fuere la razón, Ponomariov
entonces comenzó a jugar a ganar por primera vez en la partida (que iba
alrededor de la jugada 70)
Yendo a ganar: Ponomariov mete presión a Deep Junior
Primero Ponomariov parecía ir mejor, puesto que el rey del programa parecía
algo expuesto en el centro, pero luego se dio la vuelta a la tortilla y quedó
claro que Pono estaba mucho más a la defensiva. Y luego volvió cambiar otra vez,
para darle a Pono una razón para jugar a ganar otra vez, con un caballo frente
al no muy maravilloso alfil del programa. Justo cuando Junior se estaba apurando
de tiempo, en la fase a caida de bandera del control de tiempo, los jugadores
repitieron movimientos y se terminó la partida.
Manejando a Junior con el joystick de un teclado IBM: Amir Ban en apuros de
tiempo
Con el resultado de hoy, tres tablas, los grandes maestros lograron un total
de 4 de 12,
medio punto más que el año pasado. Así que ¿qué hemos aprendido de este torneo y
que viene luego?
Entrevistas para la televisión, en los exteriores de la sala de juego en
Bilbao
El acontecimiento de Bilbao ha mostrado una vez más que los mejores programas
del mundo son aún algo más que un encuentro para los mejores grandes maestros.
Parece que ahora hay pocos motivos para cualquiera fuera de los diez primeros
del mundo para afrontar un programa líder (¿O es diez un número demasiado
alto?)
Los espectadores siguen las partidas entre hombres y máquinas
En este sitio ya se ha empezado a debatir la pregunta “¿Y ahora qué?” y las
sugerencias han estado afluyendo. Mi idea es dar a los grandes maestros un peón
de ventaja, haciendo que los programas jueguen siempre con blancas y sin su peón
a. Pero la idea que más me gusta es la sugerencia del Gran Maestro (y antiguo
Campeón de Alemania) Christopher
Lutz de que se debería permitir a los GMs observar la pantalla del monitor a lo
largo de la partida, permitiéndoles ver exactamente lo que está pensando el
programa en todo momento.
La Opera de Bilbao, de camino al restaurante de la cena de clausura
El mismo restaurante parrilla del año pasado
La forma tradicional de escanciar la sidra en el País Vasco
Ruslan Ponomariov repasa su gigantesca partida durante la cena
Que los vegetarianos miren para otro lado: esto es lo que se sirvió en
copiosas cantidades