ChessBase 17 - Mega package - Edition 2024
It is the program of choice for anyone who loves the game and wants to know more about it. Start your personal success story with ChessBase and enjoy the game even more.
Continuación de Stupak, Nikolov y Bernadskiy ganaron el X Abierto de Paleochora
Paleochora es un pequeño pueblo en la isla de Creta, a 77 km al sur de La Canea o Chania (que es también el aeropuerto más cercano) y ocupa una pequeña y pintoresca península. Tiene menos de 2000 habitantes.
En algún tiempo no había nada en Paleochora, ni siquiera la península en la que se asienta la ciudad. El terreno estaba en el fondo del mar y solo la colina de la fortaleza, donde ahora se alza un fuerte veneciano, sobresalía como una pequeña isla entre las olas. Un fuerte terremoto hizo que el lado oeste de Creta se elevase y la península de Paleochora emergió de las profundidades justificando su sobrenombre de "Novia del mar de Libia".
Para viajar desde India, tomamos un avión de Bombay hasta Atenas, luego otro hasta La Canea y después un autobús hasta Paleochora. ¡El viaje nos llevó 30 horas!
Lleva unas 2 horas llegar desde el aeropuerto de La Canea hasta Paleochora, pero el tiempo vuela con unos paisajes tan espectaculares | Fotografía: Amruta Mokal
Las casas de Paleochora no pueden tener más de 2 pisos. Eso, combinado con que parte de la ciudad es cerrada al tráfico cada noche, da a Paleochora el aspecto de una villa tranquila. | Fotografía: Amruta Mokal
La playa pedregosa a un lado de la península | Fotografía: Amruta Mokal
Y la playa de arena al otro | Fotografía: Amruta Mokal
Agua azul cristalia. Nadar en esas aguas relaja y te pone en el estado mental perfecto antes de la partida | Fotografía: Amruta Mokal
Gente de muchos lugares de Europa acude a pasar unas vacaciones relajantes a Paleochora. Durante el día, en la playa, al sol | Fotografía: Amruta Mokal
Y durante la noche se puede disfrutar de una terraza | Fotografía: Amruta Mokal
Este vídeo de 2 minutos da una idea de lo hermosa que es Paleochora
No sé por qué esta vista me recuerda la popular serie de televisión "Juego de tronos" | Fotografía: Amruta Mokal
Cuando ves imágenes como esta entiendes que jugar un torneo en Paleochora es como un sueño para cualquier ajedrecista. ¿Pero cómo empezó el torneo en una pequeña ciudad como ésta? | Fotografía: Amruta Mokal
El abierto de Paleochora es un torneo maravilloso con una bolsa de premios bastante buena (7000 EUR) y una fuerte nómina de jugadores (15 GM y 15 MI en la edición de 2017). ¿Cómo llegó a ser tan popular? Todo empezó con una visita del GM Krum Georgiev para una exhibición de partidas simultáneas frente a algunos de los jóvenes de la ciudad.
El alcalde vio el espectáculo y quedó fascinado. Decidió que Paleochora debía alberga una gran competición. ¡Incluso pensaba en un duelo por el campeonato mundial! Tal era su entusiasmo.
El GM Krum Georgiev, el responsable de que comenzase el abierto de Paleochora! Por cierto, ¿sabía que Krum venció a Garry Kasparov en una salvaje y complicada partida en la Olimpiada de Malta en 1980. ¡Compruébelo! | Fotografía: Amruta Mokal
La Canea (Chania) es el ayuntamiento más grande cercano a Paleochora y el entrenador jefe del club de ajedrez de esa ciudad, Kostas, y su esposa Anelia Tsarouchas acometieron la tarea de organizar la primera edición del abierto de Paleochora en 2008.
"No esperábamos muchas inscripciones", dijo Kostas, rememorando como comenzó el torneo. "¡Pero las llamadas empezaron a llegar y al final casi llegamos a los 200 inscritos!".
Kostas y Anelia, la potencia tras el abierto de Paleochora | Fotografía: Amruta Mokal
El AI Sotiris Logothetis ha sido el árbitro jefe de las 10 ediciones | Fotografía: Amruta Mokal
El apoyo del alcalde sin duda fue una gran bendición para el torneo. Incluso hoy, en la 10ª edición, la bolsa de premios la aporta el alcalde. Pero se necesita más que dinero para premios para organizar un torneo: alojamiento, viaje, refrigerio, sala de juego... hay muchas cosas de las que encargarse. Fue como si toda la comunidad ajedrecística de Paleochora se uniera para organizar esta enorme prueba y cuidase de las necesidades de los ajedrecistas.
Donde quiera que haya un supermercado... | Fotografía: Amruta Mokal
O una tienda, puede ver carteles promocionales de la prueba | Fotografía: Amruta Mokal
"Hace unos años, cuando Grecia fue golpeada por la crisis económica, fue un momento duro par nosotros", dice Anelia. "Pensamos que no se podría organizar el torneo aquel año, pero recibimos llamadas de los jugadores para venir al torneo. Habían quedado encantados con el sitio y querían volver a Paleochora".
Alberto David con Inna Iasman. Alberto ama tanto Paleochora que ha estado en las 10 ediciones del torneo | Fotografía: Amruta Mokal
Jugando al backgammon en uno de los cafés. La pareja conoce muy bien los alrededores, se desplazan en bicicleta y se asemejan mucho a la gente de allí | Fotografía: Amruta Mokal
El torneo sobrevivió a los duros momentos de la depresión económica. Aunque los alcaldes de Paleochora siguieron patrocinando los premios de la competición, patrocinar el alojamiento y manutención de los jugadores punteros fue muy difícil. "Pudimos covencer a los hoteles para aportar algunas habitaciones gratis y a los restaurantes para que diesen vales de comida. Cuando hay 200 jugadores en un torneo, suelen traer a casi 200 acompañantes. Y eso es una gran oportunidad de promocionar los negocios para esos establecimientos", dijo Anelia.
Pizzerias como Odyssey, Portofinno, Niki sirven algunas de las mejores pizzas que hemos comido | Fotografía: Amruta Mokal
Kalitsounia es un plato famoso de la cocina cretense. Es un pastel relleno de queso y hierbas aromáticas. | Fotografía: Amruta Mokal
Incluso para un vegetariano como yo la comida no fue un problema en absoluto. El rissotto estaba delicioso, lo mismo que las verduras a la parrilla | Fotografía: Amruta Mokal
Si le gusta la comida marina, está en el sitio adecuado. Caravella sirve pescado fresco capturado en el día. | Fotografía: Amruta Mokal
Y siempre tiene que dejar sitio para el postre. No es algo que haya que pagar. Los restaurantes ofrecen raki (una bebida alcohólica) y algo de fruta (sandía en la imagen) por cuenta de la casa. Todos los restaurantes de Paleochora siguen esa tradición. | Fotografía: Amruta Mokal
Las plantillas de los restaurantes fueron muy amables y agradables. Por ejemplo, en el Cafe Zygos, donde desayunamos todos los días. ¡La mujer al poder! | Fotografía: Amruta Mokal
Sala de análisis... bueno: ¡calle de análisis! | Fotografía: Amruta Mokal
¡La sala de torneo está en el centro de Paleochora y la sala de análisis está en la calle justo en el exterior! Se dispone de 15 tableros y cualquiera podía sentarse y jugar una partida o ver como analizaba un gran maestro. ¡Qué forma más hermosa de popularizar el juego!
¡Caos de medianoche! ¡Torneo relámpago por equipos! | Fotografía: Amruta Mokal
El domingo muchos ajedrecistas llegaron desde La Canea y otros lugares cercanos para ver el torneo. La política de los organizadores es sencilla: ¡todo el mundo debería tener una opción de jugar al ajedrez! Por lo tanto, organizaron un torneo relámpago por equipos, tras terminar la ronda a eso de las 23:00. Se trataba dde pura diversión, sin premios ni inscripciones. Con todo participaron 41 equipos. Eso significa casi 160 jugadores. ¡Y todo el mundo estuvo relampagueando jugadas hasta las 3 de la madrugada! ¡Lo único que puedo decir es que fue una congragación de verdaderos amantes del ajedrez!
Una hermosa forma de decorar la tienda, ¿no le parece? | Fotografía: Amruta Mokal
Artesanía local vendida en la calle | Fotografía: Amruta Mokal
El autor de estas líneas en las famosas ruinas de Paleochora | Fotografía: Amruta Mokal
¡Visitar Paleochora quizá fue una dde las mejores decisiones que Amruta y yo hayamos tomado! Lo pasamos muy bien, no solo visitando lugares, disfrutando de la playa y la comida, sino que en el torneo también nos fue bastante bien. Yo sumé 6.5/9, terminando el 19º y ganando algunos puntos Elo, pero más importante aún es que disfruté jugando al ajedrez en un ambiente libre de estrés. Quiero rubricar el artículo con una de las partidas que jugué y que me gustó mucho.
