La invitación estaba escrita en inglés y georgiano. Incluso los nombres de los destinatarios aparecían con caracteres georgianos
Aquí fue la ceremonia religiosa
Los invitados holandeses a la espera
¡Vaya par de tortolitos!
Los ajustes del último minuto
¡Aquí llegan los novios!
El ritual que transformó a Sopiko y Anish en dama y rey
¡Literalmente!
¡Posando con los novios y vitoreándolos!
Fue un día largo para Sopiko, pero a pesar del calor y de los numerosos huéspedes a los que tuvo que atender, la novia mantuvo la sonrisa todo el tiempo. Era la felicidad en carne y hueso. Esta es la única imagen que tengo en la que se toma un respiro.
¿A dónde vamos?
¡Una boda con mucho Elo!
Anish acaba de encontrar nuevo trabajo
¿Para qué más literatura?
La ceremonia civil
¡Ya puede dar comienzo el baile!
Ya es hora de marcharnos
¡Brindemos!
Los bailes tradicionales no faltaron en honor de la pareja y sus invitados
Con momentos inesperados
No tengo una fotografía de Anish cantando porque eso fue por la tele, pero pueden creerme: su pieza desató los aplausos
La tarta corría el peligro de sólo ser fotografiada
Era digna de contemplar desde todos los ángulos
Uno de los regalos holandeses: un ajedrez de Swarovski
El momento más esperado por las damas solteras
Anish, sé que te gusta ganar, pero me temo que esta vez te han dado jaque mate...