31/01/2003 – Tras dos partidas dominadas por Kasparov,
Deep Junior pudo mostrar su fuerza. Repelió el ataque de Kasparov, ganó un peón y aguantó los nervios en el final, tendiendo una diabólica trampa en la que cayó el humano. Kasparov insistió en la anti Merano que le diera tan buenos resultados en la primera partida, repitiendo esquemas con 10.g4. Esta vez el ordenador fue a por el material y todo el mundo veía un ataque fulgurante de Garry, que desarbolaría el materialismo del programa. Pero la posición abierta resultante, con posibilidades de escaramuza por todo el tablero favorecía a las capacidades del inhumano. En la jugada 24 el de Bakú sólo tenía 23 minutos en su reloj. Aunque hacia la jugada 30 parecía que todo podría terminar en tablas, la persistencia en el ataque en una posición abierta y la falta de tiempo forzaron la rendición de Kasparov en la jugada 36. Se ha llegado al ecuador del duelo empatados y con la emoción por todo lo alto.. Puede ver la partida
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