Explora tu interior

por Sagar Shah
16/03/2023 – Sagar Shah ha sido ajedrecista, entrenador, periodista, YouTuber, empresario y mucho más. En su periplo por distintos países y torneos, ha acumulado mucha experiencia. En su nueva serie "From the CEO's Desk", el MI indio comparte sus reflexiones y pensamientos sobre diversos temas, a veces relacionados con el ajedrez y a veces simplemente con la vida. Hoy, Sagar se adentra en las emociones y los miedos más profundos de un ajedrecista, estableciendo paralelismos con su propia vida.

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¿Por qué te sientes así?

"Tu ira es un poco excesiva", me dijo Amruta (mi mujer). "Tienes que controlarla". Me senté, pensativo. ¿Por qué en ciertos momentos pierdo completamente la calma? ¿Por qué me convierto en alguien a quien ni siquiera yo reconozco? Me senté e intenté pensar en ello profundamente. Ya sabes, las emociones profundas, como la ira, el miedo, la alegría, los celos, a menudo se incrustan en nosotros a causa de ciertos episodios de nuestra vida. Intenté pensar cuál fue ese episodio que me hizo sentir como me sentía y que me hace perder la calma cuando tengo mis discusiones con Amruta.

Fue en algún momento de 2012, hace varios años, cuando yo era un joven de 22 años. Acababa de convertirme en contador certificado (CA). Se supone que es un logro bastante decente aprobar el examen en el primer intento, y yo estaba tratando de hacer algo en el ajedrez. Tenía alrededor de 2300 de Elo y venía jugando bastante bien ese año.

Sagar Shah

En 2012, poco después de clasificar a los Campeonatos Nacionales de la India

En aquella época, me invitaron a casa de un chico de unos 16 años cuyos padres querían preguntarme cómo había conseguido mantener mi carrera de ajedrecista sin renunciar a mis estudios. Fui a casa del chico para reunirme con sus padres y nos sentamos en el salón. La madre del chico tomó las riendas y empezó a hacerme preguntas. El padre estaba sentado en un segundo plano, escuchando la conversación. Me hacían una pregunta tras otra: cuántas horas estudiabas, cómo te las arreglabas durante los exámenes, a qué biblioteca ibas a estudiar, ¿hay alguna posibilidad de hacer carrera en el ajedrez? La madre del chico era bastante agresiva con sus preguntas.

Justo cuando terminé una de mis respuestas, el padre me hizo una pregunta. Me quedé un poco desconcertado porque era la primera vez que hablaba desde hacía bastantes minutos. Cuando me disponía a responder, la madre me dijo: "No hace falta que respondas, tiene la costumbre de hacer preguntas tontas". La pregunta no me había parecido tonta, pero me detuve en seco. Miré al padre. Se había retirado a su silla con la sensación de haber hecho algo malo. Me sentí muy triste porque el padre no había hecho nada malo. La madre me hizo algunas preguntas más, respondí y salí de la casa. No sé por qué, pero aquel día me marcó profundamente como persona. Sentí que nunca quería acabar como el padre de aquel niño. Sentía que él estaba dominado en el matrimonio, que no tenía absolutamente nada que decir respecto a temas importantes.

Ese día tomé la decisión consciente de liberarme de todos los sentimientos profundos relacionados con ese episodio. Me costó, pero el primer paso fue tomar conciencia. Cuando te das cuenta de ciertas cosas, puedes trabajar sobre ellas e intentar mejorar tu forma de pensar, de reaccionar y de tomar decisiones.

Sagar Shah, Amruta Mokal

Dos almas felices que recorren el planeta con un único objetivo: dar mayor cobertura al ajedrez

¿Por qué escribo todo esto en un boletín de ChessBase India? ¿Estoy loco o qué? Bueno, lo creas o no, pensar de la forma en que lo hice anteriormente tiene algunas implicaciones para ti en tu vida personal, así como en tu vida ajedrecística. ¿Cómo es eso? Bueno, ahora que he dejado de jugar al ajedrez, a menudo me pregunto cuáles eran algunas de las mayores limitaciones que tenía como jugador al sentarme frente al tablero. Aunque no lo tenía nada claro cuando jugaba, ahora lo tengo más claro que el agua. He aquí algunas cosas que no hacía tan bien:

1. Siempre que los peones se enfrentaban en el centro de forma que las blancas los tenían en c4 y d4 y las negras en c5 y d5, me sentía incómodo. Todas esas capturas me hacían sentir náuseas. Al instante intentaba disolver la tensión. Lo mismo me pasaba con los peones en e4 d4 contra e5 d5. Me sentía abrumado.

 

Es muy importante para un ajedrecista poder sostener la tensión en el centro

2. Las posiciones simétricas me ponían muy nervioso, especialmente en los finales y sobre todo contra jugadores de menor nivel. Solía pensar que una estructura simétrica me llevaría a las tablas. Así que me esforzaba por desequilibrar la posición. La verdad es que las posiciones simétricas no son tablas. Hay muchos más elementos que deben tenerse en cuenta. Pero apenas los tomaba en cuenta.

 

Las posiciones simétricas no siempre están completamente igualadas

3. Había perdido una dolorosa partida que fue bastante igualada en un final de alfil contra caballo cuando yo tenía el alfil. Ese final me había hecho perder la confianza en el manejo del alfil en un final puro de alfil contra caballo, y siempre que tenía opción evitaba entrar en ese tipo de desequilibrio material. A veces incluso llegaba a elegir líneas de apertura que no me dejaran una situación de alfil contra caballo.

 

Una de las batallas más importantes sobre el tablero es la que enfrenta a un caballo y un alfil en un final — evitar estos finales puede ser muy perjudicial

Hay muchos más puntos como estos que plagaron mi pensamiento como ajedrecista. ¿Lo ves? He intentado analizarlos en un nivel mucho más profundo que un simple "no se me da bien la táctica", o "no se me dan bien los finales", o "no se me da bien el cálculo". Los puntos que he enumerado son más específicos. Ocurrieron debido a ciertos incidentes que me hicieron sentir incómodo en algún momento, y mi mente me hizo alejarme de ellos de forma natural. Está bastante claro que si no los abordaba, no sería capaz de jugar de acuerdo con las exigencias de la posición. Siempre tomaba decisiones dominadas por mi subconsciente/emociones y no por la evaluación objetiva de la posición en el tablero.

Sagar Shah

Cuando las cosas no salen bien, a veces hace falta enfocar la energía | Foto: Amruta Mokal

¿Cómo se pueden resolver estos problemas? Bueno, una vez que los has identificado y eres consciente de ello, en realidad no es demasiado difícil. Tienes que encontrar posiciones similares y estudiarlas detenidamente, o necesitas un entrenador experimentado que te ayude a entrenarte para afrontar esas situaciones con eficacia la próxima vez que se presenten. Pero el primer paso es profundizar en uno mismo y tomar conciencia. Yo luché por hacerlo como ajedrecista y también en mi vida normal. Te pido que te tomes un tiempo para ello.

Pregúntate cuáles son tus demonios. Ve al fondo de la cuestión. ¿Por qué te sientes así? ¿Hubo ciertos episodios que han desarrollado esos sentimientos en ti? Ten paciencia e intenta identificarlos. Y cuando lo hayas hecho, intenta abordarlos poco a poco. Cuando comprendí que un episodio completamente aleatorio de mis veinte años estaba repercutiendo en mi matrimonio a los treinta, supe que me estaba equivocando en alguna parte.

Sé que lo que he escrito aquí es más fácil decirlo que hacerlo. Pero si nunca piensas en ello, o nunca lo intentas, nunca podrás resolverlo. Este artículo es mi pequeño intento de que te tomes el tiempo para mirar dentro de ti.


Este artículo forma parte del boletín semanal n.º 18 de ChessBase India, que contiene las principales noticias de ajedrez de la semana, artículos del MI Sagar Shah y ofertas interesantes en los distintos productos de nuestra tienda en línea. Al inscribirte, recibirás el boletín en tu bandeja de entrada todos los sábados.


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Ajedrecista indio con dos normas de MI. Periodista especializado en ajedrez y entrenador.