TIME
100 es una lista anual recopilada por la revista
Time con los 100
personajes más influyentes del mundo en ese momento. Fue publicada por primera
vez en 1999 como la lista de las 100 personas más importantes del siglo. Pronto
se convirtió en una cita anual, presentando a las personas más influyentes de
ese periodo. Hay cinco secciones diferentes: líderes y revolucionarios,
constructores, artistas y actores, científicos y pensadores, héroes y pioneros.
Cada una de las categorías cuenta con 20 nominados, a veces en parejas o
pequeños grupos. La revista indicó que las personas que figuran en la lista son
los que cambian el mundo, sea para mejor o para peor.
Quienes ostentan el récord en cuanto a nominaciones son Oprah Winfrey, que
figuró en cinco ocasiones, seguido por Bill Gates (cuatro veces), George W. Bush,
Bill Clinton, Nelson Mandela y Condoleezza Rice (tres veces).
En la lista de este año salen
la Reina Isabel de Inglaterra, los candidatos en las elecciones
presidenciales de EE. UU.
Hillary Clinton y
Barack Obama, la Secretaria del Estado
Condoleezza Rice,
el Papa Benedicto XVI, los fundadores de YouTube
Steve Chen y Chad Hurley, el director de cine
Martin Scorsese y la supermodelo
Kate Moss. Además, la revista Time nominó a 14 "donantes de poder",
entre los que están
Bill y Melinda Gates,
Angelina Jolie, la Reina
Rania al-Abdullah de Jordania y
George Soros. La lista incluye a 71 hombres y 29 mujeres de 27 países. No
figura el Presidente Bush.
En la lista TIME 100 están los actores
Leonardo DiCaprio,
Sacha Baron Cohen (de la película "Borat") y también a
Brad Pitt,
Justin Timberlake,
Cate Blanchett y
America Ferrera. Entre los políticos están el gobernador de California
Arnold Schwarzenegger,
Nancy Pelosi,
Michael Bloomberg,
Angela Merkel,
Tzipi Livni,
Sonia Gandhi y el
Ayatolá Ali Khamenei. Entre los científicos y "pensadores" figuran
Al Gore,
Neil deGrasse Tyson y
Richard Dawkins. Los "constructores y titanes" incluyen a
Richard Branson y
Steve Jobs, mientras que los "héroes y pioneros" incorporan a la estrella de
tenis
Roger Federer,
Oprah Winfrey,
George Clooney y
Michael J. Fox.
"TIME 100 no es una lista de los mejores. No es una lista de los más
poderosos o más populares, sino de los más influyentes", escribe el editor
Richard Stengel. "Buscamos a personas cuyas ideas, cuyos ejemplos, cuyos
talentos, cuyos descubrimientos cambian nuestro mundo. Sí, hay presidentes y
dictadores que pueden cambiar el mundo por mandato, pero estamos más interesados
en innovadores como Monty Jones, el científico de Sierra Leona que ha
descubierto un nuevo tipo de arroz que puede salvar la agricultura de África. O
héroes como el gran maestro de ajedrez Garry Kasparov, que lleva una lucha
solitaria por más democracia en Rusia". Así es como lo describen:
Garry
Kasparov
Por Michael Elliott
A Garry Kasparov le gusta decir que ha estado en política durante toda su
vida. En la Unión Soviética, su país natal, el ajedrez era una forma de
demostrar la superioridad del comunismo sobre los decadentes países del mundo
occidental y como prodigio de ajedrez fue inevitable ser también una figura
política. Kasparov nunca esquivó ese destino. Cuando se enfrentó con Anatoly
Karpov y venció inesperadamente al preferido del ajedrez soviético en 1985, la
imagen de Kasparov llegó a ser la de un marginado en su propio país, mitad
judío, mitad armenio.
La posición social de Kasparov se ha mantenido en la Rusia post-soviética. Su
organización "La otra Rusia", una coalición de todos los que se oponen al
gobierno del presidente Vladimir Putin, ha llevado a cabo una serie de
manifestaciones, que muchas veces fueron disueltas por la policía. Para Kasparov,
la Rusia de hoy, dominada por una combinación de enormes empresas de energía y
los antiguos burócratas de seguridad (como Putin), es una traición a los que
soñaron con la democracia a principios de los años noventa.
Los enemigos de Putin abarcan desde los viejos nacionalistas pasados de moda
hasta los modernos liberales. Kasparov, de 44 años, insiste en que él solamente
es uno de los responsables pero no el líder del movimiento. Pero al ser portavoz
de los que creen que Rusia se puede desarrollar por otro camino que no sea el
del autoritarismo (aunque este parece que siempre ha sido el destino del país),
el gran maestro retirado demuestra que aún no ha realizado el último movimiento.
Fuente:
Time Magazine
Traducción: Nadja Woisin