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El 10 de febrero fue un día muy emocionante: Veselin Topalov, el campeón mundial de ajedrez, vino a la Ciudad de México a jugar unas partidas simultáneas. La exhibición se hizo en la Casa del Lago, en medio del bosque de Chapultepec que está en esta gran ciudad. Sólo pudieron jugar contra el campeón 40 jugadores; entre ellos había artistas, señores y niños.
El parque Bosque de Chapultepec es el más grande de México D. F. y lugar de numerosas atracciones históricas y culturales
Fue un día muy especial para nosotras. Desde temprano estuve pensando qué jugar y cómo jugar. Tenía ganas de jugar muy bien. Mi hermana Sofía, que tiene 7 años, pensaba que si le ganaba al campeón ella sería la nueva campeona del mundo (cosas de niñas!!). En la escuela estuvimos todo el tiempo practicando de ajedrez. En la tarde, después de comer, fuimos por fin a jugar a la Casa del Lago. El día era muy bonito. Hacía sol y se sentía calor a pesar de que en México es invierno.
The Casa del Lago está situada en medio del parque, al lado de un lago
La exhibición comenzó a las 6 de la tarde. Había mucha gente. Sólo se permitió la entrada a los que jugaron y a los que hicieron su reserva con tiempo. Eran muchos, pero muchos aficionados. Nunca pensamos que había tantos interesados en el ajedrez en México. Había gradas y una transmisión por televisión con comentarios de las partidas más interesantes.
Veselin Topalov jugando la simultánea en la Casa del Lago
La exhibición duro poco más de cuatro horas y media. Sólo cuatro jugadores pudieron empatar con el campeón. Al principio sentí que estaba haciendo una gran partida. Sin embargo, poco a poco, veía que estaba perdida. Esperaba un milagro, pero no llegaba. En un momento se acercó hasta donde estábamos mi hermana Sofía y yo.
Solo un minuto, chicas. Creo que Ta7+... gana.
Levantó su mano, apuntó con su dedo y ¡zas!, arruinó mi posición. Fue terrible. En ese momento supe que estaba perdida.
El momento de la verdad para Sarah y Sofia
Paso a paso, fue ganándoles a todos. Y aunque sólo cuatro pudieron empatar, lo mas importante fue que todos disfrutamos mucho. El campeón fue muy amable. Nunca nos imaginamos que sería tan simpático y gentil.
Fue todo tan emocionante que al final del evento me quedé dormida y al despertar pensé que había soñado. Sólo hasta que mi papá me mostró las fotografías supe que no había sido un bonito sueño. El resultado fue entonces para mi hermana y para mí lo de menos.
Sarah y Sofia Saggiante con los hijos de Susan Polgar en las Bahamas
Sarah Saggiante tiene diez años y es una forofa del ajedrez. Su padre Jorge es el principal patrocinador de torneos en México, como, p. e., Cuernavaca.
