The
Day Kasparov Quit
(El día que Kasparov se fue)
Diez años después de su famosa publicación, Finding Bobby Fischer,
Dirk Jan ten Geuzendam, editor jefe de New In Chess, ha recopilado una
serie de particulares entrevistas y retratos de las más brillantes estrellas del
ajedrez. El libro se titula The Day Kasparov Quit ("El día que Kasparov
se fue") y brinda 344 páginas llenas de fascinantes encuentros con los grandes
de nuestro juego.
The Day Kasparov Quit ha sido publicado por la Editorial New In
Chess y está disponible en librerías de ajedrez o bien directamente en la
tienda en Internet de New In Chess.
En el prólogo del libro The Day Kasparov Quit, ten Geuzendam explica
el encuentro con Bobby Fischer en Sveti Stefan en 1992, le dio el impulso para
publicar una colección de entrevistas bajo el título Finding Bobby Fischer.
Esta vez fue otro acontecimiento histórico el que le convenció para recopilar
sus entrevistas favoritas de los últimos diez años: la retirada de Garry
Kasparov en Linares 2005. No es por casualidad que haya escogido la entrevista
de despedida con Kasparov, como último capítulo del libro.

Garry Kasparov anunciando su retirada el 10 de marzo de 2005
La mayoría de las entrevistas en The Day Kasparov Quit fueron
publicados en New In Chess, pero hay tres que nunca habían aparecido en
inglés hasta ahora. Una de ellas es la favorita del propio autor: la inolvidable
impresión de un día al lado de Miguel Najdorf, ya entrado en años, en Buenos
Aires en 1994.
Un vistazo al contenido muestra que Dirk Jan no escatimó esfuerzos para
conseguir lo que deseaba lograr. Las 26 entrevistas con 22 jugadores diferentes
(Anand, Kasparov y Kramnik figuran más de una vez) se llevaron a cabo en 14
países diferentes.

Vladimir Kramnik caminando por el escenario en la Olimpiada de Manila 1992.
Fue allí donde celebró su 17 cumpleaños con un impresionante estreno
internacional.
Los grandes maestros con los que se encuentra Dirk Jan ten Geuzendam son muy
variopintos. Jóvenes estrellas como el Campeón de EEUU Hikaru Nakamura se codean
con leyendas como David Bronstein o Yury Averbakh, cuyos retratos demuestran la
afición del autor a la historia del ajedrez. Vladimir Kramnik explica cómo el
equipo checo de hockey sobre hielo le inspiró para derrotar a Kasparov, mientras
Henrique Mecking revela cómo Jesús le ha ayudado a encontrar el movimiento
adecuado. Con la mayoría, Dirk Jan coincidió en los grandes acontecimientos
ajedrecísticos, pero en algunos casos también fue a visitar a los jugadores a
sus casas, como, p. e., a Bronstein, Kasparov y Judit Polgar.

Garry Kasparov hablando con Dirk Jan ten Geuzendam tras la conferencia de
prensa en el Ayuntamiento de Linares en 1993. A la izquierda de Kasparov está el
periodista español Leontxo García. A la derecha de DJtG hay más periodistas:
Angel Asensio (Agencia EFE) y Arturo Xicotentatl de México.
En medio de las reuniones con Ilyumzhinov, Taimanov, Shabalov, Kortchnoi,
Ivanchuk, Hübner y muchos más, Garry Kasparov, que estuvo encabezando la lista
mundial durante más de 20 años, lógicamente ocupa un lugar muy especial del
libro. En el transcurso de los años, Dirk Jan ten Geuzendam le debe haber
entrevistado docenas de veces. Algunas de las más memorables entrevistas van
incluidas en el libro. Como ya hemos mencionado, la histórica retirada de
Kasparov da final al libro. Y también a una época: marca el final de la era
Kasparov y lo hace con impresionante detalle.
En la tapa del libro The Day Kasparov Quit figuran las siguientes
recomendaciones:
Kirsan Ilyumzhinov: "Quizá en un año o dos iré a un monasterio para
limpiarme mi alma. Para limpiarme de la política y de los negocios. Para hablar
con Dios. La última vez que hice una visita al Dalai Lama en India, este dijo:
'Si quieres, puedes quedarte por un mes o dos'. El Papa me ha sugerido lo mismo.
Me ofreció una celda en el Monasterio de Assisi. Depende de Dios. Cuando sienta
que ha llegado el momento, iré al monasterio".
David Bronstein: "Sacrificaría un caballo, pero siempre habría algún tipo
de salida de emergencia. Una perpetua o a lo mejor daría un peón para alcanzar
un empate de alguna manera. Pero también podría ganar y, por supuesto, perdí de
vez en cuando. Recuerdo como sacrifiqué mi dama contra Smyslov. En el momento
que lo hice, supe que fue un error, pero aquel día había tantos espectadores que
les quería ofrecer un poco de diversión".
Vishy Anand: "Ya te digo, lo más gracioso fue cuando iba en coche de
caballo por las calles de Chennai. Me llevaron al centro en este coche de
caballos y yo debía estar sentado allí y saludar a la gente haciendo señales con
la mano. En algún momento, pasó un autobús por el carril opuesto de la calle. El
conductor frenó el autobús en el medio de tráfico, se bajó, cruzó la calle, me
estrechó la mano diciéndome que le parecía fenomenal todo y volvió corriendo
para seguir su camino. Y ninguno de los pasajeros se quejó. Al contrario:
estaban allí saludando con la mano alegremente también".
Garry Kasparov: "Hay muchas cosas que consumen mi energía porque tengo que
estar motivado. Sea que escriba un libro de ajedrez o uno sobre cómo tomar
decisiones y la filosofía del ajedrez, sea que vaya a una manifestación en Rusia
gritándole a Putin, sea que dé una conferencia a la Comunidad de Negocios en
Entrelagos o en Belo Horizonte, si no se trata de algo que me motive no lo puedo
hacer. Y ya no me motivaba".
Hikaru Nakamura: "De hecho siempre he jugado de esa manera. Al perder o
ganar, aprendes. Mientras no te sirven para nada realmente esas tablas. ¿Qué
haces cuando aceptas un empate tras 15 o 20 movimientos, en qué sentido te
sirve? Es posible que te sirva en el torneo, pero ¿te sirve para aprender algo?
No lo creo. Básicamente éste siempre ha sido mi estilo: simplemente intentando
ganar y no aceptar tablas".
Traducción: Nadja Woisin