Estreno mundial de "Ludwig"
por André Schulz
El duelo entre el Campeón del Mundo de Ajedrez Kramnik y el programa de ajedrez
"Deep Fritz" forma parte del programa de acontecimientos relacionados con los
puntos de enlace entre Ajedrez y Arte.
Stephan Andreae, el Director del "Forum" en el Palacio de
Artes y Exposiciones en Bonn
El pasado domingo, se inauguró
la serie de actividades con un coloquio público. Al día siguiente, el lunes, la
biógrafa de Philidor Susanna Poldauf puso de
relieve las relaciones entre el Ajedrez y la Música mediante la personalidad de
Philidor. Francois André Danican, conocido como "Philidor" (1726-1795) fue un
reconocido compositor de óperas y al mismo tiempo el mejor jugador de ajedrez de
sus tiempos.
Para muchos, el Ajedrez es una de las ocupaciones humanas más creativa
que hay. El ajedrecista necesita talento, fantasía y excelentes capacidades
intuitivas para tener éxito. Actualmente, el mundo se queda impresionado al
observar como una máquina puede competir con el mejor jugador de ajedrez humano,
e incluso ha alcanzado un marcador de 2:1 a mitad del duelo, aunque estando
todavía lejos de solucionar el problema de las 32 piezas de ajedrez en su
totalidad.
Afortunadamente contamos con algunos otros campos de
dominio, únicamente humanos, como la Pintura, la Poesía y la Música. Esta
última, sin embargo, acaba de ser explorada con unas herramientas que provienen
del desarrollo de los programas informáticos de ajedrez.
Ayer Matthias Wüllenweber, programador jefe de
ChessBase, conmovió al público con una presentación de su programa de
composiciones y aprendizaje de música "Ludwig".
Matthias Wüllenweber
¿¡Una máquina que compone
música?! ¡Vaya! Matthias Wüllenweber, inventor, gerente y jefe de programadores
de ChessBase, se interesa por muchas cosas diferentes y de sus inquietudes suele
salir casi siempre algún interesantísimo programa informático.
En sus tiempos de estudiante
universitario de Física, le gustaba el ajedrez. Cuando salieron al mercado los
primeros ordenadores "asequibles", a Matthias Wüllenweber le pareció una
consecuencia natural tener que desarrollar una base de datos de ajedrez para
ellos. Hoy en día se conocen y utilizan con el nombre de "bases de datos
ChessBase" en prácticamente todo el mundo del ajedrez. Más adelante, Wüllenweber
recibió numerosos premios por el desarrollo de su programa de simulaciones de
Física, "Albert".
Otra afición de Wüllenweber es la Música. Y no sólo como oyente, sino que
también ha alcanzado un buen nivel a la hora de tocar y cantar él mismo. Hace
poco, fue invitado por el Instituto Goethe a Kaliningrado para dar un concierto
junto con un amigo suyo. Los que disfrutan de los programas de ajedrez "Fritz"
también encontrarán música en algunas partes, que el programador jefe ha
introducido en el programa "clandestinamente".
La ocupación con los algoritmos de ajedrez por un lado y la música por el otro
han conducido a un interesante descubrimiento: efectivamente, según Wüllenweber,
de la técnica del árbol de búsqueda se puede extraer algo para la búsqueda de
armonías en la música. O más dicho de forma más sencilla: los programas de
ajedrez pueden componer música.
Árbol de búsqueda en el ajedrez
Explosión combinatoria:
- el número de posiciones en el árbol de búsqueda aumenta exponencialmente
con la profundidad de búsqueda
- la cifra para el tiempo de cálculo de una media jugada adicional de
profundidad de búsqueda es un múltiplo del tiempo utilizado hasta el presente
- consecuencia: el ajedrez probablemente es insoluble
Árbol de búsqueda en el programa compositor de música "Ludwig"
La relación entre el Ajedrez y la Música siempre ha sido evidente, pero hasta
ahora no se podía definir exactamente. Existe un cierto número de dobles
talentos, siendo Philidor y Mark Tajmanov los más famosos. Muchos de los buenos
jugadores también se suelen sentir atraídos por la música. El jugador de elite
Peter Svidler, preguntado por qué juega al ajedrez, comentó: "A mi modo de ver,
las cosas del mundo aspiran a convertirse en Música. El Ajedrez está muy
próximo". El pianista ruso
Nikolay Lugansky, ganador del Concurso Internacional Tschaikowsky, es un
apasionado ajedrecista.
Para los musicólogos, la idea
de melodías creadas por máquinas será un escenario un tanto abrumador.
La interfaz del nuevo programa "Ludwig" de la empresa ChessBase
La flauta travesera en el conjunto de la orquesta informática
Matthias Wüllenweber, inventor y programador del novedoso programa de
composiciones, "Ludwig"
El primer intento no suena del
todo perfecto aunque tampoco está tan mal como sería de esperar. Cuando hace 20
años los ordenadores empezaron a jugar al ajedrez hubo muchas risas y bromas
entre los maestros acerca de los primeros pasos de las máquinas en el juego del
ajedrez. Hoy "Deep Fritz" se enfrenta con el Campeón del Mundo. Al escuchar
el intento de Wüllenweber, no parece que la máquina esté tan lejos de las
habilidades humanas, como en el caso del programa de ajedrez en aquel entonces.
El programa "Ludwig" compone melodías siguiendo determinadas premisas y permite
al estudiante incorporarse con su propio instrumento en una orquesta, para así
perfeccionar sus habilidades con la ayuda de melodías creadas en el momento. Es
un programa de enseñanza de música. El módulo de composiciones incorporado al
programa sirve para componer piezas de música y melodías en un abrir y cerrar de
ojos. ¿Hacia dónde vamos? ¡Ya se verá!
La velada fue inaugurada por el
discurso del experto en teorías de la conspiración Mathias Bröckers, que habló
de la paranoia y de las teorías de la conspiración en los genios del ajedrez,
escogiendo como punto de partida a Bobby Fischer.
Mathias Bröckers
Fotos: Wolfgang
Rzychon
Traducción: Nadja Woisin