
Los finales de partidas con la constelación alfil vs. caballo o vice versa, en muchas ocasiones suelen ser muy sútiles y son difíciles de comprender. El final de partida siguiente, con las piezas negras realizando maniobras complicadas con el rey y el caballo para ganar la partida al final, son un típico ejemplo para ello. ¿Realmente fue una victoria a la fuerza o podrían las blancas haber sobrevivido, quizá por la regla de los 50 movimientos?
Les invitamos a nuestros lectores a rumiar un poco esa problemática. En el caso de que las blancas se pudieran haber salvado el cuello, ¿cómo?