Poikovsky no está demasiado lejos de Khanty Mansiysk, donde se disputará la Copa del Mundo y la Olimpiada de Ajedrez de 2010. La región petrolífera tiene bastante dinero para apoyar al ajedrez profesional, aunque la prioridad es, por supuesto, la promoción del ajedrez entre los niños. Hay buenas perspectivas de que el ajedrez entre en el currículo escolar en la región autónoma de Khanty-Mansi y hay muchos pequeños clubes de ajedrez en las escuelas locales. Todos los años, los grandes maestros que juegan en Poikovsky pasan su día libre dando sesiones de simultáneas a niños en diversas localidades, a veces bastante lejos de Poikovsky.
Clases de ajedrez en un club local
Emil Sutovsky (de gafas, sonriendo) visitó la escuela del pueblo de Chauskino
El gran maestro israelí fue el maestro de ceremonias en el torneo de la
escuela
... dio una sesión de simultáneas...
... charló con los jóvenes entusiastas del ajedrez...
... y recibió un regalo adecuado de los niños
Es uno de los poquísimos, sino el único, torneo profesional de ajedrez incluido en el presupuesto del gobierno local. Naturalmente, depende de la lealtad del gobernador al ajedrez, así como de la simpatía y cooperación de los grandes maestros. Los participantes se seleccionan minuciosamente, poniendo el énfasis en su carácter. Viorel Bologan y Alexander Onischuk han pasado los ocho tests y son los jugadores que tienen el pleno de participación. Sergey Rublevsky tiene siete participaciones. Recientemente ha cambiado el gobernador de la región, así que es importante que el torneo de este año vaya como la seda, para asegurar la tradición en los años venideros. Se espera que el nuevo responsable esté en la ceremonia de clausura, donde deseamos que alivie a jugadores y organizadores con una decisión positiva. Posiblemente estarán también algunos pesos pesado, como Karpov e Ilyumzhinov.
Viorel Bologan analiza con el desafortunado Zhang Pengxiang
Emil Sutovsky y Alexander Onischuk analizan su partida
Sergey Rublevsky y el imparable Dmitry Jakovenko tras su encuentro
La tensión del torneo prácticamente se evaporó en la ronda siete, cuando Dmitry Jakovenko derrotó a su principal rival Evgeny Alekseev en una Siciliana sin alternativas. Resultó que Alekseev, a medio punto, estaba decidido a asumir riesgos para obtener la victoria, a pesar de jugar con negras. Pero su elección de la apertura fue desafortunada, ya que Jakovenko tiene un marcador excelente en esa variante, y entendió mejor todas las sutilezas. En las rondas que quedan Dmitry jugará contra Istratescu, el de peor Elo, que parece que se contenta con su marcador del 50%, y contra Zhang Pengxiang, que no ha violado otra tradición de Poikovsky en cuanto al rendimiento bajo par de los jugadores chinos, quizás en parte debido a la famosa hospitalidad siberiana. Una ventaja de un punto por delante de una plantilla muy sólida debería bastar en esta situación.
¿Qué hice mal? Alekseev y Jakovenko analizan 15.c3 en su partida
Vlad Tkachiev, que languidece con -1
¿Se acuerdan de los monitores de tubo de rayos catódicos? Jakovenko y Evgeny Alekseev
navegan en la sala de prensa
Alexander Onischuk hablando para los medios locales, que se personan todos
los días en la prueba y entrevistan a los jugadores para radio, televisión y
prensa
La segunda plaza posiblemente se la disputen Sergey Rublevsky y Alexander Onischuk, aunque casi cualquier jugador puede alcanzarlos, con un poco de suerte en las últimas rondas.
Como es un torneo con presupuesto oficial, la bolsa de premios es relativamente pequeña. Sin embargo, los jugadores nunca se van descontentos de Poikovsky. Hay muchos patrocinadores comerciales que anuncian (o incluso adjudican) sus premios en la ceremonia de clausura. estoy seguro que estarán encantados con el éxito de Jakovenko, ya que Dmitry nació en la cercana ciudad de Nizhnevartovsk, que también pertenece a Khanty-Mansi AO.
El estadio de hockey justo enfrente de la sala del torneo
Un edificio de la universidad de Poikovsky
Y sí, el comienzo de la primavera es a veces bastante helador en Siberia, pero no en esta ocasión. No encontré ninguna diferencia entre Rusia occidental y Poikovsky, excepto la blancura brillante de la nieve de aquí. Por desgracia, me pasé mucho tiempo de puertas adentro, por lo que no encontré los osos que sin duda andan por las calles de Poikovsky.
