ChessBase 17 - Mega package - Edition 2024
It is the program of choice for anyone who loves the game and wants to know more about it. Start your personal success story with ChessBase and enjoy the game even more.
Hace pocos días he tenido la oportunidad de poner a prueba la Enclopedia de Aperturas de ChessBase en su última edición: 2016. Y me gustaría compartir con ustedes esta reseña que he hecho del producto junto con mis conclusiones.
Para entender bien este producto es preciso estar familiarizado previamente con dos conceptos: el de base de datos y el “árbol de aperturas”. Una base de datos es un almacén en el que clasificamos partidas de ajedrez otorgándoles distintos atributos. Un árbol de aperturas, como su propio nombre indica, es un esquema estructurado que nos permite comprender visualmente las distintas variantes y subvariantes de una o varias aperturas.
Una vez asentados los conceptos anteriores, me atrevo a definir la enciclopedia de aperturas como un híbrido entre ambos conceptos, es decir, un producto que conjuga las características de ambos elementos con el objetivo de ayudar específicamente al ajedrecista en la optimización de su preparación de aperturas. Solo una matización antes de seguir con el siguiente punto: la base de datos está compuesta a su vez por 931 “mini bases de datos” que la conforman, casi nada.
Como todos los productos que he probado hasta la fecha de ChessBase, la instalación no representa ningún problema, tras varios clicks seguidos el programa (trae dos ficheros de instalación consecutiva) se instala por defecto en la carpeta de documentos de nuestro equipo, y a partir de este momento podemos “llamarle” desde cualquier GUI (graphical user interfaces), ya sea Fritz, Chessbase, ChessBase Reader.
Una vez abrimos cualquiera de nuestros GUIs o visores, las dos funcionalidades de la aplicación se ejecutan desde una misma instancia, lo que facilita bastante la tarea de navegar y estudiar.
El producto es muy flexible, me refiero a que es una herramienta con un enorme potencial y cada jugador o preparador podrá encontrarle múltiples usos, además de los “evidentes” para los que ha sido creada.
Personalmente, creo que puede impulsar considerablemente la curva de aprendizaje de un repertorio de aperturas, así como facilitar su construcción, ¿por qué razón? Veamos las razones.
En primer lugar, porque permite tener acceso a más de 5.000 informes de aperturas, con lo cual, es posible escudriñar las sutilezas de una línea de juego mientras leemos las anotaciones. Y no, no estoy hablando de las típicas frases y notación de ajedrez, al menos en las líneas que he estado analizando (las que yo juego), he encontrado autores de prestigio desgranando las bondades de cada jugada, por ejemplo, Moskalenko especialista de la Defensa Francesa, analiza las subvariantes principales de la variante del avance; y, cómo él, muchos otros autores de prestigio: Ribli, Stohl (¡especialista en Emmanuel Lasker!), Mihail Marin, el prolífico Finkel…
Debajo les muestro un ejemplo de uno de los informes, como puedes ver las explicaciones se acompañan de diagramas y referencias a partidas que están enlazadas y que uno puede visualizar. Además, podrán utilizar el logrado filtro de búsqueda de partidas de Chessbase que permite no solo estudiar mientras esté leyendo sino acudir rápidamente a partidas o cadenas de texto relacionadas con el tema que te interesa.
En segundo lugar, porque podemos utilizar el poderoso árbol de aperturas para seleccionar líneas de juego basándonos en 4 factores: el número de partidas que se han jugado con una variante o subvariante concreta, el porcentaje de victorias (también de tablas y derrotas), el elo medio de los jugadores y la performance (la performance es un anglicismo que utilizamos para definir algo así como “la actuación” del jugador, es decir, el nivel al que ha jugado respecto a su nivel de Elo oficial).
Por tanto, podemos conjugar los 4 elementos para saber, por ejemplo, qué aperturas o variantes son más comunes en la práctica, cuáles han sido los resultados para estas variantes y cuanto peso ha tenido el Elo o al rendimiento de los jugadores. Como digo, esta es una sola de las utilidades, pero la herramienta es muy versátil y creo que la podremos adaptar fácilmente a nuestras necesidades.
Ejemplo de árbol de variantes:
Por cierto, si les interesan los árboles de variantes existe un proyecto muy interesante (Arbor Ludi) de visualización de datos compuesto por una serie de representaciones gráficas que reconstruyen el árbol de juego de ocho de los mejores ajedrecistas de los últimos 100 años.
En tercer lugar, la selección de 931 bases de datos agrupadas por código ECO de aperturas es de gran ayuda porque, aunque hayan seleccionado partidas por su cuenta para su estudio (esto en el mejor de los casos), difícilmente podrán disponer de una clasificación tan pormenorizada de líneas de juego. Con lo que si, por ejemplo, desean adentrarse en la variante Najdorf de la defensa siciliana, van a poder apoyarse en decenas de mini bases de datos, con lo que todo el trabajo de clasificación ya lo tienes hecho, y eso son muchas horas de estudio.
Observe, sin ir más lejos, la clasificación de esta variante que tan popular hizo Kasparov. Y cuando pinchen en cada uno de los enlaces accedes al informe y a la base de datos en una única interfaz con el contenido separado por pestañas (siguiente gráfico), ¿no es genial?
El desarrollo informático nos ha beneficiado mucho a los ajedrecistas, ahora podemos hacer cosas de manera más rápida y eficiente. Lo que significa una ventaja competitiva para aquellos que sepan sacarle partido. Una ventaja competitiva que no teníamos antes.
La Enciclopedia de Aperturas de Chessbase te proporciona información, conocimiento y datos, muchos datos… Estos datos son de alta calidad y están bien ordenados, con lo que podrás analizarlos de forma fiable.
A partir de aquí el trabajo lo tienen que hacer ustedes, lógicamente; pero es una herramienta idónea para ser usada como “centro de operaciones” en su preparación de aperturas. A partir de ella, podrán completarla con anotaciones, estudios propios, partidas de su cosecha o información que obtengan de otras fuentes, aunque en ella vayan a encontrar más de 5 millones y medio de partidas, de las cuales 84.000 están comentadas ¿para qué más?
Texto y fotos: Daniel Muñoz
