Aprender a ganar con GM Jan Markos: ¿Por qué es más fuerte la amenaza que la ejecución?

por Jan Markos
22/05/2024 – La conocida humorada "La amenaza es más fuerte que su ejecución" se atribuye a Aron Nimzowitsch (en la foto), número 3 del mundo en sus mejores tiempos y autor del clásico "Mi sistema". El dicho es conciso y paradójico, y ha confundido a muchos ajedrecistas. Después de todo, ¿cómo puede una amenaza ser más fuerte que su ejecución? Jan Markos tiene algunas respuestas. | Foto: L'Echiquier 1931

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"La amenaza es más fuerte que su ejecución" es probablemente una de las reglas más desconcertantes del ajedrez. Recuerdo que me dijeron esta frase (atribuida a Nimzowitsch) muchas veces en mi adolescencia y seguía sin entenderla, a pesar de que por lo demás era un estudiante de ajedrez relativamente brillante.

Estaba confuso: ¿por qué no debo ejecutar una amenaza fuerte? ¿Por qué debo esperar? ¿Y cómo de fuerte puede ser una amenaza si es mejor no ejecutarla?

Hace poco acabé por casualidad en un foro de ajedrez sobre este tema y me di cuenta de que muchos jugadores de club piensan lo mismo.

Un jugador llamado Divyesh_B preguntó: "He oído esta frase en muchos vídeos de YouTube y la he leído en algunos libros, pero nunca he entendido cómo una amenaza puede ser más fuerte que su ejecución. ¿Puede alguien explicármelo?".

Por desgracia, las respuestas a esta pregunta tampoco fueron especialmente claras:

"Amenaza significa que la otra parte se ve obligada a defenderse, lo que frustra sus ideas de actuar contra ti.... supongo".

"No me preguntes, nunca he dicho eso....:-("

"En principio, eso significa que la amenaza es un farol".

Así que nos toca a nosotros explicar esta misteriosa regla de Nimzowitsch. Empecemos con un bonito ejemplo:

Shcherbakov - Daniliuk, Elista 1995, juegan las blacnas:

Las piezas ligeras blancas parecen un rifle cargado. Las blancas tienen toda una serie de damas de dama, pero ninguna de ellas gana inmediatamente. Por tanto, las blancas mantuvieron todas sus opciones abiertas en la partida y simplemente se llevaron un peón con 40.Dxa7!? Ganó la partida sin mayores problemas.

Sin embargo, las blancas podrían haber ganado más directamente. ¡La mejor continuación era la sorprendente 40.Df4! Qxa1+ 41.Rh2, por ejemplo 41...Rf6 42.Dd6+ Ae6 43.Df8+ Af7 44.Dg7+ ganando la dama negra en a1.

Observe cómo la dama blanca coopera con el caballo de f5 en esta variante. La danza de la dama blanca sólo fue posible porque las blancas se abstuvieron de "disparar" y dejaron el caballo en su fuerte posición.

Al retrasar el movimiento del caballo, las blancas logran algo notable: su caballo está en muchos lugares a la vez. Por supuesto está obviamente en f5, pero al mismo tiempo también está en h4, g3, e3, e7, d6 etc., ya que las blancas pueden moverlo a esas casillas inmediatamente. El caballo blanco en f5 se parece al gato de Schrödinger: está en f5 y al mismo tiempo no lo está.

Una amenaza no ejecutada nos permite enfrentar a nuestro rival con dos escenarios al mismo tiempo: 1) la amenaza se ejecuta, y 2) la amenaza no se ejecuta. Nuestro adversario debe estar preparado para ambos escenarios y adaptar su juego en consecuencia. Esto significa que sus opciones son muy limitadas, mientras que las nuestras se amplían enormemente.

Además, normalmente sólo retrasamos la ejecución de las amenazas si aún no son decisivas. Por lo tanto, no ejecutar la amenaza significa buscar el mejor momento para ejecutarla.

♞♘♞♘♞♘

En la siguiente posición, las negras iban con demasiada prisa: 

Petrosian-Zhou, Lake Sevan 2011, juegan las negras:

Las blancas tienen una buena posición de ataque y la mayoría de sus piezas se dirigen contra el rey negro. Por tanto, Zhou había decidido tirar del freno de emergencia con 25...d3? Pero no consigue suficiente compensación por el peón sacrificado. Tras 26.Axd3 Cxd3 27.Txd3 Txd3 28.Dxd3 Td8 29.De2 las blancas tienen una posición más favorable. La pareja de alfiles negros tiene buena pinta, pero no tiene por dónde atacar. Esto le da tiempo al bando de las piezas blancas, mejorar su posición sucesivamente. 

Pero las negras podrían haber sido mucho más pacientes. En la posición del diagrama el jugador de las piezas negras tiene muchos recursos defensivos si espera con la jugada ...d4-d3 hasta que llegue el momento adecuado. La paradójica jugada 25...h5! sugerida por uno de mis alumnos es muy fuerte. Las negras debilitan un poco la protección de su propio rey, pero le quitan la casilla g4 al caballo blanco y retrasan así el ataque del bando blanco. Por supuesto, 26.Cf3 queda descartada, ya que ...d4-d3 es entonces mucho más fuerte que antes.

Tras un largo análisis llegamos a la conclusión de que las blancas probablemente deberían jugar 26.Ad3 para detener la amenaza de ...d4-d3. Pero tras 26...Cxd3 las negras se aseguran la pareja de alfiles como en la partida, pero aquí su peón sigue en d4 y la relación de material es igual. Un buen resultado por un poco de paciencia, ¿no?

He aquí la partida completa:

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El siguiente ejemplo procede de una partida extremadamente importante, concretamente la décima partida del encuentro por el Campeonato del Mundo de 2016 entre Carlsen y Karjakin.

Carlsen-Karjakin, World Championship match (10), Nueva York 2016, juegan las blancas:

Un breve recordatorio de las circunstancias en las que se jugó esta partida: Carlsen estaba en una situación competitiva muy difícil. Había perdido la octava partida del duelo, pero aún no había ganado ninguna. Con sólo dos partidas más por jugar, tenía que ganar absolutamente esta posición favorable.

El plan de las blancas es sencillo: deben superar el avance b4-b5. Pero, ¿cuándo habría que atacar? ¿Ahora, o mejor algo más tarde?

¿Cuándo es posible esperar con una amenaza? Bueno, cuando el rival no puede evitar la amenaza de todos modos. O, más generalmente, si no puede mejorar su posición en un futuro previsible. En la posición del diagrama, el tiempo no juega un papel tan importante para las negras, ya que tienen que defenderse pasivamente durante mucho tiempo.

Carlsen, por tanto, ha decidido ser paciente. Al posponer la amenaza ha creado serios problemas psicológicos a su rival. Las negras siempre tienen que esperar b4-b5 en las siguientes jugadas, y eso cuesta mucho tiempo y energía.

La partida continuó lentamente:

48.Ta3 Cd4 49.Td1 Cf5 50.Rh3 Ch6 51.f3 Tf7 52.Td4 Cf5 53.Td2 Th7 54.Tb3 Tee7 55.Tdd3 Th8

Oye Magnus, ¿ha llegado el momento?

56.Tb1

No, de momento aún no. Antes de nada había que atraer la torre de h8 a una casilla menos ventajosa. 

56...Thh7 57.b5!

¡Ahora sí, que sí! Carlsen finalmente comenzó on un ataque directo, y resultó ser exitoso. Karjakin se rindió 18 jugadas más adelante.

Es imposible decir exactamente cuánto tiempo y energía Carlsen habría robado a su rival al retrasar el avance b4-b5, pero creo que la mayoría de nosotros sabemos por propia experiencia  lo difícil que es psicológicamente ser capaz de esperar pasivamente en una mala posición.

Aquí está la partida completa:

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La regla "amenaza-ejecución" también puede ayudarnos a la hora de calcular variantes. Nos recuerda de que, a veces, un ataque puede ralentizarse ventajosamente tras unas cuantas jugadas forzadas.

Krasenkow-Radjabov, Dos Hermanas 2001, Juegan las negras:

En esta posición, Radjabov ha decidido permitir b2-b4 y ha jugado 11…Ce8 . Pero al escribir mi libro "Beat the KID", que trata de la Defensa India de Rey, me he dado cuenta de que las negras pueden jugar de manera mucho más ambiciosa. 

Lo más lógico sería 11…Ad7!

Ahora las blancas tienen que jugar 12.b4, dado que las negras amenazan con paralizar al flanco de la dama blanca con …a5-a4.

Las negras responden con un sacrificio:

12…Ccxe4! 13.Cdxe4 Cxe4 14.Cxe4 f5 15.Cc3

¿Y ahora, qué? Parece que las negras no tienen ninguna continuación que justificaría el sacrificio. 15…f4 renunciaría a la casilla e4 y, 15…e4 permitiría 16.Ad4. ¿Tiene recompensa suficiente el bando negro?

¡Efectivamente, sí! Sólo tiene que recordar la regla "amenaza-ejecución". Tras el sencillo movimiento 15...De7!!! las blancas se encuentran en una posición difícil. Las negras de repente amenazan con jugar ...f5-f4 y ...e5-e4. La posición sigue siendo más o menos igualada, pero es mucho más fácil de jugar para las negras que para las blancas. (Puedo revelar que las mejores jugadas de las blancas parecen todas paradójicas a primera vista: 16.h4, 16.b5 o incluso 16.Ce4).

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Dicho en resumen: 

  1. Si la amenaza decide la partida de inmediato, habrá que llevarla a cabo. No hay poruqe esperar entonces.
  2. Si la amenaza es prometedora pero no decisiva, entonces podría ser aconsejable esperar con la amenaza, ya que esto limitará las opciones del oponente, que tendrá que prepararse a varios escenarios posibles diferentes. 
  3. Esperar para amenazar también podría ayudar a encontrar un mejor momento para ejecutar la amenaza.
  4. También es estresante y psicológicamente difícil para su oponente esperar para ejecutar la amenaza, por lo que puede ser psicológicamente ventajoso esperar para ejecutar la amenaza.

Conversando con Jan Markos

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Traducción al castellano: Nadja Wittmann (ChessBase)


Jan Markos es un autor, entrenador y gran maestro eslovaco. Su último libro, “The Secret Ingredient”, en coautoría con David Navara, ganó el Premio Averbakh-Boleslavsky en 2021 y se centra en los aspectos prácticos del juego. Markos fue campeón de Europa sub-16 hace veinte años. En la actualidad ayuda a sus alumnos a lograr éxitos similares. Además, es autor de varios libros no relacionados con el ajedrez, centrados en el pensamiento crítico, los dilemas morales y la fenomenología.
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