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El gran maestro Panno (86), es el más alto referente del ajedrez argentino. Nacido en la ciudad de Buenos Aires en 1935, se convirtió en campeón mundial de ajedrez juvenil (1953); el primero en la historia del ajedrez argentino, obtuvo el título de gran maestro internacional de ajedrez (1955), para más adelante, conseguir el de ingeniero en la prestigiosa Universidad de Buenos Aires (1962).
Uvencio Blanco: Maestro Panno, háblenos sobre cómo se fue desarrollando su carácter, su talento, como ajedrecista.
Oscar Panno: Empecé hacia los 6 años cuando mi padre compró varios juegos de salón con la idea de que mi hermano y yo, nos alejáramos un poco del juego de la pelota en la calle. Entre dichos juegos estaban los dados, el ludo, las damas y el ajedrez.
Aunque fue él quien nos enseñó el movimiento de las piezas: no fue sino a partir de la lectura de una columna de ajedrez que aparecía regularmente en una revista, cuando comenzamos a comprender mejor este juego. Ocurrió que mi padre coleccionaba la revista “Leoplán”. Una revista literaria y de contenidos periodísticos, cuyo objetivo principal era proponer un plan para la lectura; una obra de divulgación cultural y con un criterio de visión muy avanzado que demostró que las revistas también podían servir para educar a la población. Allí, el maestro Roberto Grau tenia una columna llamada “Entre las torres” en la cual aparecían partidas, problemas, consejos, anécdotas, etc.
Grau fue un gran didacta, el abuelo del ajedrez argentino; mientras que el padre fue Miguel Najdorf, quien fue traído por Grau a la Argentina, a través de la Olimpiada de Ajedrez de 1939.
Aprendimos con la nomenclatura vieja, la descriptiva. Luego, encontramos en la biblioteca de mi abuelo, un libro de Bogoljubov que se llama “Peón 4 Dama”, la apertura moderna y entonces me puse a leer y estudiar; así fui creciendo. Después todos los libros que encontraba los estudiaba, sobre todo en vacaciones. Mientras, jugábamos torneos familiares y con los vecinos.
Hacia 1947, a los 11 años y por la recomendación de un médico amigo que recomendaba la práctica de la natación para el desarrollo corporal, mi padre nos hizo socios del Club Atlético “River Plate”. Un club organizado, el cual tenía una sala de ajedrez que estaba bien dotada con libros, piezas, relojes y planillas, pero no había profesor de ajedrez. Porque Roberto Grau, quien había sido docente allí, había fallecido años antes (1944) y el club no lo había reemplazado.
Pero en 1951 contrataron a Julio Bolbochán, un gran didacta, un gran maestro, un buen teórico. Sus enseñanzas fueron muy aprovechadas y apreciadas por todos. Fue él quien comenzó a formarnos a construirnos, a un grupo de jóvenes que frecuentábamos el club. Hasta que llegó la clasificación para los torneos juveniles que se hacían acá para representar al país.
Tuvimos la suerte de que el club River Plate le facilitó licencia para que nos preparara para la contienda internacional en Europa: el Mundial Juvenil de Ámsterdam.
A los 18 años estábamos muy verdes para viajar solos y desamparados en nuestro primer viaje a Europa. Bolbochán me acompañó como técnico, con la preparación de las partidas, el análisis de posiciones y partidas suspendidas y sus valiosos consejos. Una gran compañía.
Tuvimos la fortuna de conquistar el título. Siempre digo en finales cortas puede pasar cualquier cosa, porque el mejor jugador era Boris Ivkov, de Serbia, quien había ganado el título mundial en Birmingham, Inglaterra en 1951; y todavía estaba en la edad para defender el título; pero claro, jugamos una final muy corta con 8 jugadores y 7 partidas. Tuve la suerte de ganarle en la segunda ronda y entonces no se pudo recuperar y bueno, terminamos ganando el título; que era el primer título mundial para Argentina.
Que, de alguna manera, aunque haya sido en una edición limitada, Argentina merecía esto porque Argentina tenia una base de ajedrez muy grande. Se había hecho la Olimpiada de Ajedrez de 1939, quedaron muchos maestros europeos acá, Najdorf entre ellos. Entonces vino la década de oro, la década del 50 donde Argentina obtuvo tres vice campeonatos mundiales en las olimpiadas de ajedrez y además de mi título, Carlos Bielicki también alcanzó el de campeón mundial juvenil en 1959. Por estos resultados, la llaman la época dorada del ajedrez argentino.
Aquí hacemos un paréntesis para presentar las estadísticas del Campeonato Mundial de Ajedrez Juvenil organizado por la Federación Internacional de Ajedrez FIDE), en Ámsterdam de 1953.
R. Blancas / Negras Resultado Apertura
1. Panno, O Olafsson, F 1-0 E69 India de Rey
2. Panno, O Ivkov, B 1-0 E59 Nimzo India
3. Darga, K Panno, O ½-½ E94 India de Rey
4. Panno, O Larsen, B 1-0 E18 India de Dama
5. Penrose, J Panno, O ½-½ E77 India de Rey
6. Panno, O Sherwin, J 1-0 E69 India de Rey
7. Keller, D Panno, O ½-½ B51 Siciliana
Clasificación final
GM Panno, Oscar: 5,5 puntos
GM Darga, Klaus: 5,5 puntos
GM Ivkov, Borislav: 3,5 puntos
GM Olafsson, Fridrik: 3,5 puntos
GM Penrose, Jonathan: 2,5 puntos
IM Keller, Dieter: 2,5 puntos
IM Sherwin, James T: 2,5 puntos
GM Larsen, Bent: 2,5 puntos
Oro Óscar Panno / Argentina
Plata Klaus Darga / Alemania
Bronces Borislav Ivkov / Serbia
Debemos destacar que el maestro Panno terminó el evento en calidad de invicto, luego de ganar 4 partidas y entablar las otras tres. Empatado en el 1ro/2do puestos, gana por sistema el ante el alemán Darga con quien había empatado en la tercera ronda jugando con negras. Sus victorias fueron ante los maestros: Olafsson (Islandia), Ivkov (Serbia), Larsen (Dinamarca) y Sherwin (EE: UU), respectivamente.
Vale señalar que Panno se convirtió en una promesa del ajedrez mundial: de hecho, su calidad de juego le llevó a imponerse ante maestros de la élite, algunos de ellos aspirantes a la corona mundial de la talla de Boris Spassky (quien llegó a ser campeón del mundo 1969 – 1972), Bent Larsen (durante años el numero uno de occidente), Víktor Korchnói )dos veces subcampeón mundial en sus disputas con Karpov), Lev Polugaievsky, Erich Eliskases, Lazslo Szabo y Henrique Mecking (tercero del mundo y ganador de dos Interzonales), entre otros.
Este triunfo del equipo Panno – Bolbochán en Ámsterdam 53, es considerado uno de los más altos logros deportivos del ajedrez argentino y una de las paginas mas brillantes de la llamada época dorada de los 50s.
Con base en sus relevantes méritos deportivos, desde octubre de 2021, su nombre y obra junto con la de otros grandes citados en esta nota: Bolbochán, Najdorf, Grau, Eliskases y Mecking, han sido elevados al “Salón de la Fama de Ajedrez de América”.
Continuará…
