La enseñanza del ajedrez desde un enfoque de aprendizaje activo

por Uvencio Blanco Hernández
06/05/2022 – La enseñanza del ajedrez en medios escolarizados enfrenta una serie de importantes retos desde su conceptualización y fines. El aprendizaje activo es una estrategia didáctica que implica un cambio en el enfoque en el cual el alumno deja de ser un ente pasivo del proceso y se convierte en el protagonista de su propio aprendizaje.

ChessBase 18 - Mega package ChessBase 18 - Mega package

Para ganar, primero debes aprender
La nueva versión 18 de ChessBase ofrece posibilidades completamente nuevas para el entrenamiento y el análisis de partidas: análisis del estilo de juego, búsqueda de temas estratégicos, acceso a 6.000 millones de partidas de Lichess, preparación del oponente tras una exploración de sus partidas en Lichess, descarga de partidas de Chess.com con API incorporada, motor de análisis en la nube y mucho más.

Más...

  • El aprendizaje activo es una estrategia didáctica que implica un cambio en el enfoque en el cual el alumno deja de ser un ente pasivo del proceso y se convierte en el protagonista de su propio aprendizaje.
  • En este modelo interesa que el aprendizaje esté centrado en el alumno y busca una participación activa, consciente y protagónica del mismo.
  • Para la aplicación de estrategia por parte del docente, instructor o entrenador de ajedrez, este debe asumir su rol de guía, motivador y mediador entre el conocimiento y sus alumnos.

Desafíos a enfrentar por el docente o instructor de ajedrez escolar

La enseñanza del ajedrez en medios escolarizados enfrenta una serie de importantes retos que van desde su conceptualización y fines, entre otros, proyectos orientados al desarrollo de habilidades cognitivas, el establecimiento de transferencias hacia dominios como la matemática, la formación en valores, la utilización como herramienta recreativa y/o deportiva, etcétera.

La mayoría de tales propuestas se orientan hacia el uso del ajedrez con fines recreativos y, posteriormente, con base en el desarrollo de competiciones más o menos formales, hacia el campo deportivo, Esto es, la utilización del aula como semillero, la cantera de nuevos ajedrecistas y jóvenes talentos que nutrirán las selecciones estadales y nacionales.

Otro de los problemas planteados es el de la carencia de docentes debidamente formados para la enseñanza de los principios del ajedrez en el marco de programas de alfabetización ajedrecística. Esta es, probablemente, la mayor limitación de los gobiernos regionales y nacionales al momento de considerar la puesta en escena de este tipo de programas de innovación educativa.

Así mismo, y como parte integral de todo proceso de enseñanza–aprendizaje, está el de las estrategias metodológicas que serán aplicadas en el desarrollo de los distintos cursos de ajedrez.

Una visión sistémica

Al respecto, Blanco (1995) señala que la educación ha enfatizado su enfoque en el contenido, la información y el conocimiento, pero sin darle importancia al proceso, mecanismo o método a través del cual se instruye. Opina que en función de ello podemos hablar, con propiedad, de una didáctica centrada en contenidos y una didáctica centrada en procesos.

La nueva tendencia, una didáctica centrada en procesos, hace énfasis en lo que el alumno aprende y comprende, presentando en conocimiento de tal forma que el alumno vaya entendiendo, a partir de su propio esfuerzo el mecanismo interno de adquisición de este conocimiento. Así mismo, se propone que también el alumno, más allá de que sea capaz de retener un contenido, adquiera una serie de destrezas para recolectar, procesar y transmitir información durante el proceso de aprendizaje y al enfrentarse con problemas, ya sean académicos o de la vida cotidiana.

En otras palabras, que “aprenda a aprender”, que sea capaz de saber que aprende, cómo aprende, qué pasos y estrategias debe utilizar, qué dificultades pueden impedir en un momento dado adquirir un conocimiento o resolver un problema y como superar estas dificultades. Entonces, el énfasis de la metodología utilizada en ajedrez, está cada en el estudiante y su participación dinámica en clase.

Una intervención asociada al concepto de “aprendizaje activo” y del cual nuestros diseñadores y planificadores de currículos, al igual que los administrativos y docentes participantes en proyectos de ajedrez escolar, deben tener como uno de los principios fundamentales de la instrucción ajedrecística en los diferentes centros educativos en los que esta propuesta inicia su tránsito.

El Tecnológico de Monterrey (2021) sostiene que:

El aprendizaje activo es una estrategia de enseñanza-aprendizaje que se centra en el alumno al promover su participación y reflexión continua a través de actividades que se caracterizan por ser motivadoras y retadoras. orientadas a profundizar en el conocimiento. desarrollan las habilidades de búsqueda, análisis y síntesis de la información. promoviendo una adaptación activa a la solución de problemas.

Objetivos del aprendizaje activo

Entre los más importantes debemos destacar:

  • Facilitar a los alumnos un ambiente, actividades y acompañamiento pedagógico necesario para desarrollar habilidades de búsqueda análisis y síntesis de la información, resolución de problemas, diálogo, etc.
  • Reflexionar y practicar los conocimientos y habilidades transmitidas por el maestro con el fin de cimentar recuerdos a largo plazo y una comprensión más profunda que permita a los alumnos no solo almacenar la información en su memoria sino adoptar ese conocimiento y habilidad como suyos.
  • Permite crear conexiones entre el material aprendido y pensar de manera creativa.

Esta estrategia concibe el aprendizaje como un proceso constructivo y no receptivo; e implica la concepción del aprendizaje como proceso y no únicamente como una recepción y acumulación de información.

¿Qué opina la psicología cognitiva sobre este tema?

Tal y como lo afirmamos anteriormente, la enseñanza basada en metodologías activas está centrada en el estudiante. En su capacitación en competencias propias del saber de la disciplina.

Según García-Bullé (2021), la investigación cognitiva, en particular la proveniente de la psicología, muestra consistentemente, que una de las estructuras más importantes de la memoria es precisamente su estructura asociativa. El conocimiento está estructurado en redes de conceptos relacionados que se denominan redes semánticas. La nueva información se acopla a la red ya existente. Dependiendo de cómo se realice esta conexión la nueva información puede ser utilizada o no, para resolver problemas o reconocer situaciones (Glaser 1991).

Un segundo elemento que fundamenta la utilización de las metodologías activas de enseñanza es que el aprendizaje autodirigido, es decir el desarrollo de habilidades metacognitivas, promueve un mejor y mayor aprendizaje.

Se trata de promover habilidades que permitan al estudiante juzgar la dificultad de los problemas, detectar si entendieron un texto, saber cuándo utilizar estrategias alternativas para comprender la documentación y saber evaluar su progresión en la adquisición de conocimientos (Brunning et al 1995). Durante un aprendizaje autodirigido, los estudiantes trabajan en equipo, discuten, argumentan y evalúan constantemente lo que aprenden. Las metodologías activas utilizan estrategias para apoyar este proceso.

Debemos internalizar que estas metodologías enfatizan que la enseñanza debe tener lugar en el contexto de problemas del mundo real o de la práctica profesional. Se deben presentar situaciones lo más cercanas posibles al contexto profesional en que el estudiante se desarrollará en el futuro. Igualmente, que la contextualización de la enseñanza promueve la actitud positiva de los estudiantes hacia el aprendizaje y su motivación, lo que es imprescindible para un aprendizaje con mayor comprensión y significado. Permite además al estudiante enfrentarse a problemas reales, con un nivel de dificultad y complejidad similares a los que se encontrarán en la práctica profesional.

Una propuesta ya validada

Intentando satisfacer una necesidad expresada por muchos e inspirado en una frase del maestro argentino Roberto Grau (1900 - 1944), pude desarrollar una propuesta metodológica que facilitara un programa de enseñanza – aprendizaje del ajedrez.

En uno de sus magníficos tomos del Tratado General de Ajedrez, Grau afirmó “El juego de ajedrez ha carecido de métodos de enseñanza y el hombre, de tiempo.

Bien, en dicha propuesta intentamos ser eclécticos al incorporar llos aspectos más relevantes ofrecidas por las distintas filosofías y tendencias educativas de principios de los 90s; en particular, aquellas que impulsaran al estudiante a la participación más consciente y protagónica en su proceso de aprendizaje.

Esta metodología de la acción, propuesta en la obra “Sistema Instruccional de Ajedrez”, implica un cambio sustancial en la estructura y desarrollo de las actividades diarias de la clase. Implica convertir el salón de clase en un taller en donde el movimiento, la interacción y la participación de los alumnos y docentes darán como fruto diario, la “exploración” de conceptos y principios ajedrecísticos.

Para el logro de los objetivos propuestos, recomendamos una metodología que debe estar regida por los principios de participación activa, de todos los estudiantes en el mayor número de actividades posibles. Para ello, deben considerar los siguientes aspectos:

El uso de la actividad lúdica

No tan solo como instrumento que tienda a favorecer una actitud afectiva hacia el ajedrez, sino también suscitar experiencias que ayudarán a los alumnos a comprenderlos; se ofrece la oportunidad de que, al introducir a sus alumnos en el mundo del juego, que es su propio mundo, aproveche dirigir su atención hacia el aprendizaje y ejercitación del ajedrez en competencia.

El desarrollo de los procesos en forma lógica

Partiendo de pre-requisitos o proceso básicos, hasta llegar a otros más complejos. Esto debe propiciar en el niño, la adquisición y desarrollo de mecanismos y herramientas que le permitan la reflexión, la toma de decisiones, la resolución de problemas y la búsqueda de nuevas soluciones.

La concepción de la resolución de problemas como un proceso

De pensamiento, razonamiento y desarrollo de estrategias que permitan llegar de manera exitosa, a la solución de los mismos. Esto se ve reflejado en todos los objetivos de resolución de problemas.

El desarrollo de habilidades y destrezas básicas

Como el efectuar cálculos mentales y aproximaciones por ser de gran utilidad para afianzar nociones fundamentales.

La etapa de desarrollo en la cual se encuentra el niño

En este momento, es una etapa de ampliación y organización de las operaciones concretas y comienza a formalizar concepto y estrategias de pensamiento, pero sin embargo no puede desprenderse de la acción directa sobre los objetivos. Esto se refleja en las estrategias metodológicas, al intentar estimular la acción del estudiante, partiendo de las acciones concretas para llevarlo al desarrollo de acciones interiores, cada vez más abstractas y reflexivas.

La experiencia adquirida por los niños

Tanto en su vida familiar y en las actividades dentro de su comunidad, como en su vida escolar. De allí que en el desarrollo de las estrategias metodológicas se ponga de manifiesto esta experiencia y se haga énfasis especial e la continuidad de objetivos, contenidos y, en especial de las estrategias metodológicas trabajadas por los alumnos, en la Primera Etapa de Educación Básica

Las actividades de reforzamiento

Para la consolidación de conceptos, adquisición de hábitos y normas de estudio y de trabajo, que le permitan al niño un mejor desempeño escolar. Estas actividades están constituidas por una serie de ejercicios, prácticas y diferentes propuestas con las que los estudiantes podrán trabajar para mejorar sus aprendizajes en las diferentes asignaturas cursadas. Las mismas complementarán aquellos contenidos que sean indispensables de estudiar y que correspondan al periodo de tiempo de determinada planificación diseñada por los docentes para mejorar el nivel educativo de cada estudiante.

Algunos ejemplos de participación en actividades asociadas al “aprendizaje activo” en escolares participantes en programas de ajedrez

Los docentes e instructores de ajedrez investigarán y estudiarán las estrategias metodológicas que faciliten el trabajo en el aula; entendido como un proceso de enseñanza-aprendizaje de mayor significado e importancia.

Seguidamente describimos ejemplo que describen el papel más activo que juega ahora el estudiante que se inicia en el juego de ajedrez. En general, el “Sistema Instruccional de Ajedrez” los presenta como actividades sugeridas para los alumnos.

Nivel I - Unidad IV: Fundamentos de apertura

Objetivo Nro. 34: Especificar los objetivos fundamentales, para los bandos blancos y negro, en la fase de apertura

Los alumnos:

  • Buscarán información acerca de los objetivos estratégicos, perseguidos en la fase de apertura, tanto de las blancas, como de las negras.
  • Elaborarán un esquema en el que se presenten los objetivos identificados para cada bando.
  • Discutirán acerca de la lucha por el control del centro y el desarrollo rápido de las fuerzas participantes.
  • Reproducirán partidas seleccionadas de la práctica magistral, en la que se ilustra el tema estudiado.
  • Identificarán, observarán, describirán y compararán los objetivos buscados por cada uno de los bandos en pugna.

Nivel II - Unidad II: Valorar las acciones de ataque y defensa en tanto métodos de conducción de la lucha ajedrecística

Objetivo Nro. 18: Determinar los factores dinámicos, presentes en un ataque sobre el enroque enemigo

Los estudiantes;

  • Solicitarán información referida a finales de partida: su definición, características, clasificación y ejemplos.
  • Seleccionarán y reproducirán finales de partidas extraídos de la práctica magistral en los que se observen la aplicación de los principios básicos estudiados.
  • Discriminarán configuraciones correspondientes a finales de partida.
  • Agruparán finales, en función del tipo de figuras presentes en el tablero.
  • Observarán, compararán y describirán finales seleccionados.

Nivel III - Unidad II: Reconocer que los procesos de análisis y síntesis, se complementan en la valoración precisa de una posición dada

Objetivo Nro. 13: Deducir las relaciones existentes, entre los elementos que constituyen una posición dada

Los alumnos:

  • Observarán, compararán y describirán, las relaciones presentes entre los elementos de una serie de posiciones dadas.
  • Describirán cada una de las relaciones observadas, en una serie de posiciones dadas.
  • Recabarán información respecto al proceso de valoración posicional, como resultante del análisis de relaciones existentes entre los elementos de una situación dada, sobre el tablero.
  • Precisarán la importancia del proceso de valoración posicional, como paso previo a la elaboración de planes, durante el desarrollo de la partida.

Derrota a la Siciliana con el Gambito Morra

El blanco sacrifica un peón en la segunda jugada a cambio de un desarrollo rápido de piezas y buenas opciones de ataque, y el negro puede caer muy fácilmente en alguna de las muchas celadas sibilinas en plena apertura.

Más...


Fuentes

  • Blanco, U. (1995). Sistema instruccional de ajedrez. Caracas.
  • Blanco, U. (2020). Capablanca y su método.Amazon.
  • Brunning, R. H., & Schraw, G. J. Ronning Rr (1995).“. Cognitive Psychology and Instruction 2nd ed., Englewoods Cliffs (ed) New Jersey: Prentice Hall.
  • García-Bullé, S. Tecnológico de Monterrey. ¿Qué es el aprendizaje activo? 11/03/2021.
  • Glaser, R. (1991). The maturing of the relationship between the science of learning and cognition and educational practice. Learning and instruction, 1(2), 129-144.

Uvencio Blanco Hernández, Venezuela. Comisión Ajedrez y Educación FIDE. Escritor, Investigador, Conferencista, Árbitro Internacional, Organizador Internacional, Entrenador, Profesor de Ajedrez ECU y Lead School Instructor FIDE.