Conversando con: Reinaldo Vera, un grande del ajedrez cubano (1)

por Uvencio Blanco Hernández
22/12/2021 – Reinaldo Vera es uno de los referentes más importantes del ajedrez cubano y nuestro invitado en esta entrevista. Registrado como Reinaldo Vera González-Quevedo, es un gran maestro internacional de ajedrez, entrenador y licenciado en Cultura Física. Reinaldo es matancero nacido en enero de 1961 en la población de Unión de Reyes de Matanzas, cuya capital se encuentra a unos 100 kms de la Habana, Cuba. Medallista olímpico, Construyó una familia junto a Melba Naranjo Gómez y sus hijos Ramón Francisco Naranjo y Reinaldo Vera Naranjo. Uvencio Blanco ha realizado una entrevista con Reinaldo Vera. | Foto: Wikipedia (Luciana Morales from Texas, United States - GM Reynaldo Vera)

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Uvencio Blanco: La pandemia que nos ha afectado en los últimos 2 años ha fracturado la historia poniendo en peligro la vida en el planeta y complicado el desarrollo de la actividad social. ¿Cómo te las has arreglado para sobrellevarla?

Reinaldo Vera: Las restricciones de movimiento impuestas por la pandemia han contribuido a que los ajedrecistas que compiten estudien más, se preparen mejor. En mi caso lo más notable es mayor participación en los medios de prensa. Han sido amplias las colaboraciones en la revista Peón de Rey, que dirige Illescas, en trabajos conjuntos con el periodista Jesús G. Bayolo. Precisamente un libro de ambos se presentará en febrero de 2022 en la Feria Internacional del Libro de La Habana, con el título Titanes del ajedrez cubano. Cuenta con partidas y las biografías de los 12 primeros grandes maestros, o sea, desde Capablanca hasta Leinier.

Esa es una excelente noticia y seguramente un aporte importante a la literatura ajedrecística universal; en particular, si estas acompañado con la pluma de un periodista de la calidad de Bayolo. Aunque parezca una pregunta obvia por tratarse del ajedrecista más insigne del ajedrez iberoamericano ¿Qué lazos te unen con Capablanca?

Muchos, comenzando con las enseñanzas en sus partidas, pero también otros elementos simbólicos, como que recibí el título de gran maestro en el año de su Centenario (1988). Que fui el otro cubano en ganar una medalla de oro olímpica, como hizo él en Buenos Aires 1939 y el haber sido Campeón de Cuba justo un siglo después. Recordemos que Capablanca lo conquistó con 13 años en 1901.

En medio de las restricciones impuestas por la pandemia has continuado ejerciendo una función pedagógica y de entrenamiento. ¿Podrías hablarnos de tu desempeño en un ambiente eminentemente digital y para el cual estábamos poco preparados?

He tenido que adaptarme y aprender con dificultad el manejo de diferentes plataformas como Lichess y Chessable Zoom, etc. pero ha sido una gran experiencia, pues me ha permitido trabajar con amigos de Cuba y otros muchos países como Ghana, Panamá, México.

Uno de los oficios más preciados por ti es el de entrenador de ajedrez; un área de trabajo particularmente compleja. Cuéntanos sobre tu experiencia con algunos de los seleccionados con los que has trabajado.

Entre los años 2006 - 2012, trabajé con el equipo nacional cubano; aunque prácticamente solo nos reuníamos de 7 a 15 días antes de la olimpiada. En esos encuentros tratábamos que el equipo se compenetrara psicológicamente (que, por lo general, era un equipo muy unido y solidario). Se trabajaba en la táctica (análisis de posiciones complejas, juego de posiciones, entrenamiento a la ciega) y se veían las aperturas que interesaban al grupo. También se realizaba preparación física.

En el ajedrez, como en la mayoría de los deportes, se estima que el entrenamiento con mujeres es diferente al de los hombres. ¿Pudieras referirnos en qué consiste tal incompatibilidad y cómo la manejas?

Comparto la opinión de Susan Polgar, referente a que en lo fundamental las diferencias entre los dos sexos en cuanto a resultados se debe a las oportunidades que tengan las niñas de jugar ajedrez y permanecer en el deporte. Mientras más niñas jueguen exitosamente, más motivadas se sentirán en permanecer practicando, lo que aumentará el número de buenas jugadoras. Las niñas pueden competir igual que los hombres y llegar a la excelencia en ajedrez, si se les ofrecen las mismas oportunidades. Todos los entrenadores hemos sido testigo de ver el distinto progreso de una niña y un niño que entran a un club de ajedrez con la misma edad y nivel de principiante. Muchas veces, al cabo de un año, recibiendo las mismas clases, el niño aventaja a la chica y nos preguntamos ¿cuál es la razón? Pero si observamos con cuidado notamos que el niño después de la clase se queda en el club por más tiempo, mientras que la niña la vienen a recoger sus padres al final de la clase y, aunque quiera permanecer, los padres se la llevan pues consideran que en la sala o el club prevalece un “ambiente masculino” Por eso cuando pasa el año, el niño ha jugado cientos de partidas más que la niña y ha aprendido algunos conceptos de oído, al escuchar a los otros jugadores comentando las partidas.

Otro espacio en el que es imprescindible la presencia de un entrenador de ajedrez, es aquel en el cual niños con condiciones e interés para el estudio y juego serio, necesitan desarrollar sus capacidades deportivas. En estos casos, ¿cómo registras la presencia de “talento para el ajedrez” en tus niños?

Creo firmemente que el talento es la pasión, como oí decir al gran Lubojevic en un torneo de Linares en el que yo estaba de asistente de Paco Vallejo. De eso depende que tenga capacidad de trabajo, factor que Kasparov menciona como otra forma de talento, o la capacidad de estudiar solo. Si el niño disfruta o mejor dicho, es un apasionado del juego, más allá del resultado en los torneos, tenemos un gran talento. Hay otras cosas necesarias como buena memoria, visión del tablero, un fuerte sistema nervioso, que se deben tener para garantizar el progreso; pero la pasión por el juego es lo que al final marca la diferencia.

Entonces, con base en tu experiencia y conocimiento, ¿cuáles serían las habilidades básicas que todo entrenador de ajedrez debe desarrollar en su labor y qué le recomendaciones pudieras sugerir a aquellos jóvenes maestros que se inician en este oficio?

Es muy distinto el trabajo de un entrenador en dependencia del nivel del alumno. Para entrenar o iniciar a niños lo más importante es desarrollar el amor por el juego, por lo que no se necesita un alto nivel de conocimientos para trasmitir ese placer por entender las maniobras y apreciar la belleza del ajedrez en las combinaciones de los grandes jugadores. SI vas a entrenar juveniles fuertes que aspiran a MI o GM debes tratar de detectar cuáles son sus flaquezas (Repertorio de aperturas, poca técnica, pobre nivel táctico, etc.) y diseñar un plan de entrenamiento que contribuya a superar estos problemas.

Cómo Senior de la Comisión de Entrenadores FIDE, ¿cuál ha sido tu desempeño en Iberoamérica?

Creo que he contribuido en la formación, desarrollo y titulación de más de 400 entrenadores en Iberoamérica (incluyendo un grupo de más de 30 en Italia). Han sido 12 o14 seminarios desde el primero en el 2013 en Madrid hasta el último este año que fue realizado online y dirigido por el GM y FST Alonso Zapata. Debo confesar que he aprendido mucho tanto en la preparación de los seminarios como en su desarrollo. porque usualmente los ”alumnos” tenían gran experiencia y realizaban aportes sustanciales.

Enlaces


Uvencio Blanco Hernández, Venezuela. Comisión Ajedrez y Educación FIDE. Escritor, Investigador, Conferencista, Árbitro Internacional, Organizador Internacional, Entrenador, Profesor de Ajedrez ECU y Lead School Instructor FIDE.